Los Reyes de España, Felipe VI y Letizia, han hecho historia al encabezar la delegación española en la misa inaugural del pontificado de León XIV en la majestuosa Plaza de San Pedro. La ceremonia, que comenzó poco después de las 10:30, congregó a un amplio espectro de líderes mundiales, incluyendo al presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, y la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.
Visiblemente emocionados, los monarcas ocupaban la primera fila, rodeados de representantes de otras monarquías y dignatarios internacionales. Don Felipe, luciendo su uniforme militar, y doña Letizia, deslumbrante en blanco, un color simbólico reservado para las reinas de naciones católicas, fueron el centro de atención en un evento que marcará un hito en la historia reciente de la Iglesia.
Tras la emotiva ceremonia, los Reyes se acercaron al Papa Francisco para intercambiar palabras. Durante más de un minuto y medio, Felipe VI tuvo un diálogo cercano con el Pontífice, transmitiéndole los mejores deseos del pueblo español y extendiendo una invitación para que visite España en un futuro próximo. La vicepresidenta María Jesús Montero, la vicepresidenta Yolanda Díaz y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, también estaban presentes, mostrando la unidad del país en este significativo evento.
“Hoy es una jornada emotiva para millones de católicos”, destacó Feijóo mientras Félix Bolaños, presente en la delegación, también deseó éxito al nuevo pontífice. La misa no solo marcó el inicio de un nuevo capítulo en la Iglesia, sino que también reforzó la presencia de España en el escenario mundial, resaltando la importancia de la relación entre la monarquía y la fe católica en el contexto actual. Este evento resuena con fuerza en el corazón de los fieles, dejando una huella imborrable en la historia de la Iglesia y de España.