En un giro impactante de los acontecimientos, la Fiscalía ha solicitado la medida de aseguramiento contra Caterine Andrea Martínez Martínez, alias ‘Gabriela’, una joven de 19 años implicada en el brutal atentado contra Miguel Uribe, precandidato presidencial, ocurrido en el parque El Golfito, Modelia, Bogotá. Las pruebas son contundentes: cámaras de seguridad la captaron merodeando en la zona junto a un cómplice conocido como ‘el costeño’.
La jueza no escatimó en palabras al describir la frialdad de ‘Gabriela’ durante el ataque, señalando su desprecio por la vida humana. A pesar de enfrentar cargos graves, incluidos tentativa de homicidio y porte de armas, la joven mostró una actitud desafiante, riendo en la audiencia. Su implicación es más que alarmante, ya que se cree que coordinó la logística del ataque y entregó un arma a un menor que disparó contra Uribe.
Sin embargo, nuevos testimonios complican la situación. Carlos Eduardo Mora, conductor del Chevrolet Spark gris involucrado, ha declarado que aunque ‘Gabriela’ llevó el arma, no fue ella quien se la entregó al sicario. Este testimonio podría cambiar el rumbo de la investigación y arrojar luz sobre la red criminal que opera tras el atentado.
Mientras tanto, el estado de salud de Miguel Uribe sigue siendo crítico. La Fundación Santa Fe ha confirmado que permanece en cuidados intensivos, y se han suspendido los partes médicos diarios, lo que aumenta la incertidumbre sobre su recuperación.
Las autoridades están en alerta máxima, buscando a ‘el costeño’, quien se presume es el cerebro detrás de este ataque atroz. La situación es tensa y cada minuto cuenta. La comunidad está en vilo, esperando respuestas y justicia.