Marieta Tévez, la esposa del icónico cantante argentino Leo Dan, ha rompido su silencio a los 74 años, revelando verdades conmovedoras y desconocidas sobre la vida de su esposo. En una emotiva charla desde su hogar en las afueras de Buenos Aires, compartió historias nunca antes contadas que están resonando en los corazones de sus seguidores.
Marieta, con lágrimas en los ojos, recordó cómo Leo, cuyo verdadero nombre es Leopoldo Dant Teves, nació en medio de una tormenta en Villa Atamisqui, Argentina. Desde pequeño, mostró un talento innato para la música, cantando en ferias locales a cambio de frutas. Su abuelo, un inmigrante italiano que tocaba el acordeón, fue una de las primeras influencias en su vida artística.
La vida de Leo no siempre fue fácil; trabajó en una tienda de zapatos durante el día y se presentaba en bares por la noche. Marieta reveló que, a pesar de sus éxitos, Leo guardaba una moneda de su primer concierto en el bolsillo de su camisa favorita. La pareja compartió momentos entrañables, como sus rituales de preparar mate cada 15 de cada mes, tradición que mantuvo durante sus 50 años de matrimonio.
Marieta también expuso momentos difíciles de la vida de Leo, incluyendo su lucha contra una depresión tras la muerte de su hermano. A pesar de sus batallas internas, encontró consuelo en la pintura, un talento que mantuvo en secreto. Sus últimos años estuvieron marcados por una enfermedad que afectó sus cuerdas vocales, pero nunca dejó de cantar, incluso en casa, para sus plantas.
El legado de Leo Dan vive en las canciones que compuso y en el amor profundo que compartió con Marieta. Su historia es un recordatorio de que, detrás del brillo de la fama, hay una vida llena de emociones, sacrificios y amor eterno. A través de estas revelaciones, Marieta no solo honra la memoria de su esposo, sino que también ofrece un vistazo íntimo a la vida de un artista que tocó el corazón de millones.