**La Tragedia de “Grupo Fugitivo”: Música, Violencia y el Eco de un Sueño Roto**
El 25 de mayo de 2025, la música se tornó luto en Tamaulipas y en todo México cuando cinco integrantes del grupo “Fugitivo”, un prometedor conjunto de música norteña, fueron encontrados sin vida, víctimas de un brutal error de un cártel del crimen organizado. Lo que debía ser un viaje hacia una presentación privada se convirtió en una pesadilla que resonaría en los corazones de miles.
Los jóvenes músicos estaban llenos de alegría y sueños, compartiendo su felicidad en redes sociales antes de su trágico destino. Sin embargo, tras horas de viaje, su rastro se desvaneció, y la inquietud se apoderó de sus familias cuando la señal de uno de ellos se apagó cerca de una remota zona rural. Al poco tiempo, la desesperación se transformó en horror cuando, tras un operativo de búsqueda, se hallaron sus cuerpos en condiciones desgarradoras y calcinados, en una fosa improvisada.
La noticia se propagó rápidamente, generando un clamor de indignación entre los seguidores y la comunidad artística. La Fiscalía de Tamaulipas vinculó el caso con el cártel del Golfo, específicamente con la violenta facción conocida como “los metros”. La confusión surgió cuando los sicarios, al parecer, confundieron al grupo con miembros de una banda rival.
A medida que la tragedia se desarrollaba, la sociedad se unió en un grito colectivo de justicia. Vigilias, canciones y protestas surgieron en distintas ciudades, reclamando acciones concretas del gobierno y un cambio en la cultura de violencia que ha asolado al país. La música del grupo, especialmente su tema “Volver a casa”, se convirtió en un himno de resistencia.
Mientras el eco de su historia continúa resonando, la memoria del “Grupo Fugitivo” se ha convertido en un símbolo de lucha por la justicia y la protección de los artistas en México. Su legado, marcado por el amor a la música, se niega a ser olvidado, recordándonos que incluso en la tragedia, el arte puede ser un acto de resistencia.