Un nuevo giro en el caso del asesinato de Valeria Márquez ha dejado a México en estado de shock. La influencer de 23 años fue abatida a tiros mientras realizaba una transmisión en vivo desde un salón de belleza en Zapopan, Jalisco. La Fiscalía de Jalisco ha confirmado que las pruebas forenses, incluyendo el análisis de ADN, están en marcha para identificar al sicario que acabó con su vida, así como a posibles cómplices.
Recientes filtraciones han revelado que Valeria estaba siendo seguida antes de su muerte. En videos capturados por sus seguidores, se observa cómo mostraba signos de nerviosismo y paranoia, incluso mencionando a un vehículo Camaro que la acechaba. “No son solo dos muchachos”, dice angustiada en una de sus transmisiones, lo que pone en evidencia la angustia que sentía.
Los detalles del crimen son escalofriantes. Un hombre entró al salón, preguntó por Valeria y disparó sin piedad. Mientras tanto, el hermano de Valeria, Daniel Márquez, ha compartido un emotivo homenaje en redes sociales, revelando la profunda conexión que tenían. Un ramo de flores con el mensaje “Perdón” fue dejado en el lugar del crimen, levantando sospechas sobre la implicación de una amiga cercana, Erika, quien estuvo presente en el momento del ataque.
Las autoridades están investigando diversas líneas de investigación, incluyendo la posibilidad de un feminicidio o un ajuste de cuentas. El gobernador Pablo Lemus ha declarado que se han analizado las cámaras de seguridad y se han identificado patrones de escape, pero hasta ahora, ningún sospechoso ha sido detenido.
Este caso ha encendido un debate sobre la violencia contra las mujeres en México y cómo las redes sociales pueden ser un arma de doble filo. La comunidad está exigiendo justicia, mientras la investigación avanza a toda prisa. La vida de Valeria se ha convertido en un trágico recordatorio de los peligros que enfrentan las mujeres en un mundo cada vez más violento.