**El dolor detrás del brillo: La lucha de Palito Ortega y Evangelina Salazar por su hijo Martín**
En el corazón del espectáculo argentino, donde las luces y el aplauso suelen ocultar las sombras, la familia Ortega Salazar enfrenta un momento desgarrador que ha captado la atención del público. Palito Ortega y Evangelina Salazar, dos íconos de la música y la televisión, atraviesan una crisis familiar que trasciende el glamour del escenario. Su hijo mayor, Martín Ortega Salazar, ha sido internado en un centro especializado para tratar sus problemas de adicción, un hecho que ha desatado una ola de angustia y preocupación entre sus seres queridos.
Desde fines de abril, la salud de Martín ha estado en un estado crítico, afectando no solo su bienestar físico, sino también su salud emocional. La decisión de internarlo fue un paso difícil, pero necesario, tomado por la familia después de semanas de incertidumbre y angustia. A pesar de su deseo de mantener el asunto en privado, la situación se hizo pública, lo que llevó a la familia a hablar abiertamente sobre su dolor y su lucha.
Julieta Ortega, hermana de Martín, rompió el silencio en una emotiva entrevista en Bondir Radio, donde confirmó que su hermano se encuentra en un lugar seguro y está recibiendo el tratamiento adecuado. “Martín está muy bien, aliviado. Estamos felices de que haya tomado la decisión de internarse”, expresó Julieta, transmitiendo un rayo de esperanza en medio de la tormenta. Su voz, cargada de emoción, refleja el desgaste que han sentido sus padres, quienes han vivido con la incertidumbre de no saber dónde estaba su hijo.
La internación de Martín no solo representa un acto de amor familiar, sino también una lucha contra el estigma que rodea a las adicciones. Julieta enfatizó que su hermano tomó la decisión de internarse por su propia voluntad, un punto crucial que marca la diferencia en su camino hacia la recuperación. “Un adicto no es solo un síntoma, sino alguien que desea sanar”, afirmó, destacando la importancia de la voluntad en el proceso de recuperación.
El proceso ha sido largo y doloroso, marcado por momentos de desesperación e impotencia. La familia ha buscado ayuda profesional, incluso compartiendo su experiencia en audiencias públicas para visibilizar un tema que a menudo se oculta. Julieta también hizo un llamado a la revisión de la legislación argentina sobre salud mental, señalando que a veces la única salida para ayudar a alguien con adicciones es la intervención legal.
El apoyo de la comunidad ha sido fundamental en este proceso. Artistas como Lali Expósito y Gastón Pauls han expresado su solidaridad a través de las redes sociales, destacando la valentía de Martín y su familia. Este respaldo ha servido para visibilizar un tema que a menudo se silencia, recordando a muchos que detrás de la fama también hay luchas personales y familiares.
La situación de Martín Ortega Salazar es un recordatorio de que, a pesar del brillo del espectáculo, las familias también enfrentan desafíos profundos y dolorosos. Sin embargo, la decisión de buscar ayuda y la voluntad de sanar pueden marcar el inicio de un nuevo camino. En este momento, la familia Ortega Salazar se aferra a la esperanza y la gratitud por haber dado este paso crucial hacia la recuperación.
Mientras la familia se enfoca en el bienestar de Martín, el mensaje es claro: pedir ayuda no es un signo de debilidad, sino un acto de amor y responsabilidad. La lucha de esta familia resonará en muchas otras que enfrentan situaciones similares, ofreciendo un rayo de esperanza en medio de la oscuridad.