El mundo de la música y las redes sociales está de luto tras la trágica muerte de Ana Barbara Burbulrini, conocida artísticamente como Ana B, a los 31 años. La cantante e influencer brasileña-mozambiqueña perdió la vida después de una cirugía de liposucción en Estambul, en lo que su esposo, Elgar Sueya, denuncia como un caso de negligencia médica.
Ana B y su esposo habían viajado a Turquía para celebrar su luna de miel y concretar un acuerdo con un hospital privado, que ofreció la cirugía de forma gratuita. Sin embargo, la intervención terminó en tragedia. Según informes, la joven sufrió complicaciones graves durante la fase de recuperación, incluyendo una arritmia cardíaca provocada por la anestesia. A pesar de las explicaciones del hospital, la policía ha indicado que no se puede determinar la causa de su muerte hasta que se realice la autopsia, lo que ha desatado una investigación judicial.
Elgar Sueya, conocido como Dermes, ha desmentido la versión oficial, afirmando que la operación se llevó a cabo sin considerar que Ana B había comido y bebido alcohol el día anterior, un hecho que los médicos conocían. “Perdí el control, lloré, grité. La vi en la morgue, se veía hermosa, pero estaba muerta”, expresó entre lágrimas.
La comunidad de seguidores de Ana B, que contaba con casi 780,000 seguidores en Instagram, ha inundado sus redes con mensajes de condolencias y apoyo a su esposo. Su última publicación, realizada horas antes de su muerte, promocionaba su nuevo sencillo. La tragedia de Ana B resuena como un llamado de atención sobre la seguridad en procedimientos quirúrgicos y la responsabilidad médica. Las investigaciones continúan, y el dolor de su pérdida se siente profundamente en el corazón de quienes la conocieron y admiraron.