Margarita Rosa de Francisco ya tiene más de 60 años y su forma de vivir es triste – CARLOS VIVES CONFIESA


**Margarita Rosa de Francisco: A los 60, una vida de desafíos y renacimientos**

Margarita Rosa de Francisco, una de las figuras más emblemáticas de la televisión colombiana, ha alcanzado los 60 años desafiando las expectativas y rompiendo estereotipos. La actriz, cantante y escritora, conocida por su icónico papel en “Café con aroma de mujer”, ha compartido su vida marcada por la lucha y la reinvención, dejando atrás el guion que la industria le había escrito.

Desde su infancia, Margarita se enfrentó a adversidades que la moldearon. A los 14 años, una escoliosis progresiva la obligó a abandonar el ballet, pero nunca se dejó vencer. A pesar de las cirugías y el dolor físico que ha soportado, su espíritu indomable la llevó a la cima de su carrera, convirtiéndose en virreina nacional de la belleza y, más tarde, en un ícono de la actuación.

Su vida amorosa ha sido tan tumultuosa como su carrera. Su matrimonio con Carlos Vives fue breve, pero significativo, y aunque ha tenido otros romances, Margarita ha elegido no ser madre, considerando la maternidad una responsabilidad que no estaba dispuesta a asumir sin la preparación adecuada. Esta decisión ha suscitado opiniones diversas, pero ella se mantiene firme en su postura.

En 2023, Margarita resurgió con fuerza al ganar el premio a mejor actriz en el Festival de Venecia por su papel en “El Paraíso”. Su regreso al cine no fue solo un triunfo personal, sino una poderosa declaración de que, a pesar de las adversidades, su voz sigue resonando. “Gracias por los regalos buenos y también por los otros”, dijo en su discurso, recordando que cada experiencia, buena o mala, ha sido parte de su viaje.

Hoy, Margarita Rosa de Francisco vive con autenticidad, sin la necesidad de los reflectores. Su vida es un testimonio de resiliencia, donde cada cicatriz cuenta una historia. A medida que se prepara para nuevos proyectos, como una serie que planea rodar en 2025, queda claro que su esencia es inquebrantable. En un mundo que a menudo busca encasillar, ella sigue siendo un faro de libertad y autenticidad.