A sus 92 años, Marco Antonio Muñiz rompe el silencio dejando al mundo conmocionado. La emblemática voz del bolero, que ha resonado en los corazones de millones a lo largo de siete décadas, ha confirmado que su retiro no fue solo por problemas de salud, sino por el desgaste de una vida dedicada al arte. En una emotiva conferencia, el artista, con una serenidad notable, anunció su adiós oficial, cerrando un capítulo de su vida que comenzó a los 13 años.
Muñiz, conocido como el lujo de México, ha sido un referente del romanticismo en América Latina. Desde sus inicios con Los Tres Ases hasta su exitosa carrera como solista, su legado musical es inigualable. Con más de 70 discos y una trilogía que lo catapultó a la fama, su voz se convirtió en un lenguaje universal del amor. Sin embargo, el tiempo ha pasado factura. A pesar de su indiscutible talento, su salud ha ido en declive, llevándolo a una vida más tranquila junto a su familia.
En un gesto de gratitud, su despedida no fue una serie de conciertos tristes, sino celebraciones íntimas llenas de amor, donde estuvo rodeado de sus hijos y su nieto. “Cumplí mi misión”, afirma con orgullo, dejando claro que su decisión de retirarse no fue impulsada por la falta de oportunidades, sino por el deseo de reconectar con lo personal.
Aunque su salud ha enfrentado desafíos, incluyendo una cirugía necesaria, Marco Antonio Muñiz sigue siendo un símbolo de dignidad y respeto en el mundo del espectáculo. Su historia, marcada por la pasión y la constancia, continúa resonando en cada rincón de América Latina, recordándonos que el arte auténtico trasciende el tiempo y la fama. A sus 92 años, su legado perdura, y su voz, aunque silenciosa en el escenario, sigue viva en los corazones de aquellos que lo han escuchado.