La tensión entre las casas reales de España y Suecia alcanzó un nuevo pico este fin de semana, cuando la princesa Magdalena de Suecia decidió excluir a doña Letizia de la celebración de su cumpleaños en el Palacio Real de Estocolmo. Este gesto, que muchos interpretan como una declaración de intenciones, ha dejado a la reina consorte española fuera de un evento que debería ser un símbolo de unidad entre ambas monarquías.
Magdalena, quien cumplió 43 años, no solo ha regresado a Suecia tras años en Florida, sino que también ha comenzado a forjar su propio camino en el mundo empresarial con su nueva marca de cosméticos, Minen. Mientras tanto, la relación entre ella y Letizia se ha enfriado desde un episodio de celos que involucró al rey Felipe VI. Fuentes cercanas al entorno real han confirmado que no solo Letizia no fue invitada a la celebración, sino que Magdalena emitió instrucciones para no recibir felicitaciones de la reina española.
El ambiente en el palacio era tenso, con la ausencia de Letizia destacando la ruptura de la cordialidad que una vez existió. A medida que Magdalena se posiciona como una figura más autónoma y decidida, su lealtad a la reina Sofía se hace evidente, lo que plantea preguntas sobre el futuro de las relaciones entre estas dos casas reales.
Mientras Magdalena se adentra en el mundo empresarial, su esposo, Chris O’Neill, también ha comenzado a hacer apariciones públicas, lo que sugiere un cambio en la dinámica de su rol dentro de la realeza. Este desplante a Letizia no solo es un acto simbólico, sino un claro mensaje de que la nueva generación de royals está dispuesta a redefinir su lugar en el mundo, priorizando sus intereses personales sobre las tradiciones monárquicas.
Con este episodio, la guerra fría entre las reinas parece estar lejos de resolverse. ¿Está Magdalena haciendo lo correcto al distanciarse de Letizia, o es esta una decisión que podría tener repercusiones en el futuro? La historia de poder, celos y decisiones firmes continúa desarrollándose, y los ojos del mundo están puestos en cómo evolucionará esta relación entre dos figuras clave de la realeza contemporánea.