Un suceso impactante sacudió Bogotá cuando un niño de 14 años, Juan Sebastián Rodríguez, fue detenido tras intentar asesinar al senador Miguel Uribe en el barrio Modelia. La situación se vuelve aún más inquietante al revelarse que el padre del menor, David Rodríguez, se encuentra actualmente en Europa, buscando unirse como mercenario a las fuerzas ucranianas en su lucha contra la invasión rusa.
La escena se desarrolló cuando Rodríguez, tras disparar al senador, fue atrapado por los escoltas de Uribe, gritando que lo hizo “por plata para su familia”. Sin embargo, la verdad es desgarradora: el menor no tiene familia; su madre falleció hace años y su padre lo dejó a cargo de sus tíos, quienes ahora enfrentan la angustia de la situación. David Rodríguez, involucrado en problemas legales con el ICBF, se fue a Polonia, dejando a su hijo en un entorno de inestabilidad y riesgo.
Tras el ataque, Juan Sebastián recibió atención médica en la clínica Colombia por una herida en la pierna, resultado de un disparo durante su intento de huida. Mientras tanto, las autoridades están en alerta máxima; el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, ha ofrecido una recompensa de 3,000,000 de pesos por información relacionada con el atentado, lo que intensifica la preocupación por la seguridad del menor y su familia.
Este caso pone de manifiesto la complejidad de la violencia juvenil en Colombia, exacerbada por la búsqueda de soluciones desesperadas en un contexto de crisis. La comunidad y las autoridades están clamando por respuestas inmediatas, mientras las sombras del conflicto internacional se ciernen sobre la vida de un joven atrapado en un ciclo de violencia y abandono. La situación sigue desarrollándose y todos los ojos están puestos en la respuesta del gobierno y la seguridad de Juan Sebastián Rodríguez.